El misterio de Severance

          Es extraño el fenómeno de quedar atrapado en una serie, comprometerse y quedar inmerso en ella. Quizás es una conexión  con tus propias visiones y deseos. También pasa con esas películas que vemos una y otra vez.  Con la serie  Severance  (Separación)  me ha pasado esto y  he tratado de entenderlo bien racionalmente.  La  idea no es muy nueva : una distopía tipo  1984, Brazil  o Faherenheit 451.  Mostrar que el trabajo de oficina es alienante y fantasear con liberarte de la opresión de la rutina laboral por una vida distinta no es nada nuevo.

      Entonces, buscando una explicación a mi enganche con esta serie empecé a recordar  películas que me gustaron mucho cuando era niño. Como Expreso de Medianoche, donde daban ganas de ayudar al preso a escapar de una cárcel horrible o Atrapado sin Salida, con Jack Nicholson luchando contra el poder de una perversa jefa de un hospital psiquiátrico. Más recientemente me pasó algo parecido con Un condenado a muerte se ha escapado. Y pensando en esta última película,  puedo entender mejor qué le da ese carácter especial a estas obras: Bresson le puso ese nombre (…se ha escapado) con la clara intención de que no nos importe en qué termina la película sino en el cómo está contada.

Por ahí vamos entonces, los autores crean una atmósfera opresiva, angustiante, donde un poder  gigantesco te deja sin ninguna opción de reclamo o cambio para tu situación. En el caso de Severance, la deshumanización del sistema profundiza aún más la angustia, algo que ante el avance acelerado de las inteligencias artificiales ya suena profético. Al igual que en la animación Wall-e, el factor naturaleza, los sentimientos, lo tangible, que parece totalmente disminuido y débil, se erige como la única esperanza. Suena cliché, es verdad, pero tal vez necesitamos cada cierto tiempo que nos recuerden que alguien o algo (¿nosotros mismos?) pueden quebrar el vidrio de lo establecido. En el Estallido social de Chile el 2019 quedó demostrado que una inmensa cantidad de personas desean profundamente que toda la «normalidad» cambie, y así como los cuentos de niños necesitan de un final feliz para construir en su psicología un orden sano del mundo que los rodea, los adultos necesitamos que nos muestren que se puede “abrir los ojos”. Me acuerdo también de Truman show y The Matrix.  Y una última referencia que recuerdo a partir de esta maravillosa serie, el cuento de Cortázar Instrucciones para Jhon Howell, un relato que siempre me vuelve a la cabeza,  donde un espectador que asiste a una obra de teatro se ve envuelto en extrañas circunstancias que le obligan a actuar en la misma, seguir un texto predeterminado he intentar cambiar el curso de la historia.

             Serán todos estos factores combinados los que han logrado meterme esta serie en la cabeza?.  Lo interesante es que hasta el momento se ha emitido completa sólo la primera temporada. Hace poco comenzó la segunda, por lo tanto la historia está abierta y nadie sabe cómo terminará esto. Aún estamos a tiempo de ponernos al día y pegarnos a la pantalla, y así aprovechar de olvidar por un rato el trabajo, obviamente.

(Visited 52 times, 1 visits today)